Destinos en Canadá



Costa Este

Canadá es, además de un excelente destino para viajar en pareja o con un grupo de amigos, uno de los mejores destinos para viajar en familia. La costa este, por ejemplo, ofrece ciudades cosmopolitas como Toronto, culturales como Ottawa o históricas como la amurallada Quebec que combinan a la perfección con la naturaleza ofrecida por las Cataratas del Niágara. Los bosques de la región de Charlevoix son, simplemente, espectaculares en otoño, y no hay que perderse el majestuoso río San Lorenzo, en cuyo estuario podremos avistar ballenas (de mayo a octubre), o la tranquilidad y belleza del Parque Provincial Algonquin. ¿Quién no ha soñado con alojarse en una cabaña de troncos, en medio de un frondoso bosque y a orillas de un lago? El este de Canadá es uno de los lugares donde este sueño puede convertirse en realidad.


Costa Oeste

La majestuosidad de las Montañas Rocosas nos acogerá en el Oeste, cuando nos adentremos en sus valles, llenos de lagos azul turquesa, espectaculares glaciares como el Columbia o el Victoria y donde encontramos excelentes hoteles, como los de la cadena Fairmont, unos alojamientos verdaderamente especiales situados en algunos de los paisajes más bellos de América. Finalmente nos espera Vancouver, una encantadora ciudad, puerta principal para los cruceros por Alaska y acceso natural a la Isla de Vancouver donde se encuentra la británica ciudad de Victoria y parques tan bellos como recónditos en la costa oeste de la isla. Es especialmente en el oeste donde nuestras posibilidades de avistamiento de fauna salvaje se disparan: desde el magnífico oso grizzly, el alce y lobos en las rocosas a la gran variedad de ballenas que podremos encontrar en sus costas durante sus rutas migratorias a Alaska desde el Pacífico Sur. Canadá también nos ofrece la posibilidad de realizar algunas de las actividades más atractivas que podamos imaginar: apacibles recorridos en canoas, excitantes aventuras de rafting, paseos a caballo, ir en busca de orcas a bordo de embarcaciones zodiac, la posibilidad de disfrutar de las sensaciones y belleza de la "aurora boreal" y muchas más, que convertirán Canadá en uno de sus destinos preferidos. Un destino con atractivos para cada uno de sus visitantes y una belleza natural a disposición de todos.

TORONTO

Es una metrópoli hermosa y moderna, llena de rascacielos brillantes y edificios antiguos y pintorescos, parques vastos y estadios deportivos, museos y salas de conciertos. Es la diversidad de la arquitectura, programas culturales y entretenciones lo que hace Toronto uno de los centros turísticos más cotizados, cada años vienen decenas de miles de visitantes. La calle central es Yonge Star con gran surtido de restaurantes y tiendas. Cabe señalar que aquí casi no hay tráfico, por esto Yonge Star se hizo el sitio favorito de paseos entre ciudadanos y viajeros. No lejos del centro está ubicado el centro de exposiciones de más escala, Ontario Science Center. Aquí están presentados un poco menos de ochocientos pabellones y galerías. Como se deduce del nombre, están dedicados a investigaciones científicas y a descubrimientos. Los visitantes pueden no sólo ver las muestras únicas, sino participar en unos experimentos fascinantes. Uno de los edificios más bellos es la casa del primer alcalde de la ciudad Mackenzie House. Fue convertida en museo, donde le contarán sobre la historia de Toronto. Aparte de ver artefactos históricos, los viajeros pueden probar magníficos platos, preparados según recetas antiguas, en el comedor hay un excelente restaurante. Se les aconseja a los amantes de pintura pasar por Art Gallery of Ontario que se conoce como el mayor museo de la América del Norte. Las salas ocupan un poco más de un barrio, allí caben más de 24 mil obras de pintores medievales y modernos, así mismo hay una colección de textil, cerámica, esculturas y aun calzado. El proyecto más atrevido de los arquitectos de Toronto fue la ciudad subterránea, ubicada en la plaza central. Aquí se puede visitar varios restaurantes y encontrar las tiendas más famosas.



OTTAWA

Esta ciudad sorprende con su tranquilidad, a pesar de que la atmósfera calmante no es característica de las regiones metropolitanas. Aquí hay muchos bosques, las calles están adornadas con macizos de flores de todos colores posibles, por doquier están los chalets de diversos estilos y formas. El nombre de la ciudad se traduce como “cambio”. Es que hace unos siglos era uno de los centros más considerables de comercio, adonde llegaban los mercaderes de todos los países vecinos. Unas curiosidades de las principales se sitúan en la plaza central. Aquí se levanta la torre de la Paz de 96 m de alto, se ubican los edificios que pertenecen al gobierno. Están decorados en el estilo gótico tan inhabitual para la arquitectura contemporánea parecen más unas hermosas construcciones medievales que unas modernas. Cada mañana a las diez se efectúa el relevo de centinelas, en el que participan los oficiales de la policía de caballería real. Hay aquí unas instituciones que son indispensables para la visita de apreciadores del arte. Los amantes de música clásica tienen que visitar las representaciones de la orquesta nacional canadiense que tienen lugar en el centro nacional de artes. Aquí mismo se organizan espectáculos con la participación del conjunto real de ballet de Ottawa. Los centros de exposiciones más populares son Congress Centre, Ottawa Civic Centre y Nepean Sportplex. Aquí se exponen muestras dedicadas a la pintura, literatura, historia y arqueología. Hay muchos sitios para paseos, a cada paso se puede encontrar hermosos parques y alamedas. En verano son ideales para picnics y paseos en bici, en invierno se puede esquiar aquí. Si Ud. visita Ottawa en primavera, puede participar en la celebración favorita de los ciudadanos – el festival de tulipanes.



QUEBEC

Es una ciudad antigua, situada en la cumbre de una roca. Atrae a los viajeros con su historia larga y atmósfera romántica inefable, con su naturaleza hermosa y monumentos sin fin. Convencionalmente la ciudad se divide en la Alta y la Baja. La Alta es la zona vieja, aquí se reúnen todas las curiosidades principales y los parques maravillosos. Bajando por las escaleras o en el funicular se llega a la ciudad Baja, el centro de la cual es la plaza Real. Aquí hay varios restaurantes modernos, cafeterías y galerías y una de las curiosidades principales religiosas - la iglesia de la Madre de Dios. Una de las obras de arquitectura más hermosas de Quebec es el hotel Chateau Frontenac, cuya construcción fue acabada en al año 1893. Parece un verdadero palacio y adentro está equipado según las últimas tendencias de técnica y es el más cotizado entre las instituciones de este tipo. Desde las ventanas del hotel se abre una vista panorámica inefable de la planicie Abraham - vastísimo campo verde, donde tuvo lugar la batalla legendaria de ejércitos francés e inglés. El otro evento remarcable que atrae a turistas son los carnavales de invierno. Empezaron a tener lugar en el año 1894 y desde aquel entonces cada año en febrero la ciudad se sumerge en la atmósfera de alegría y magia. Se llevan a cabo los concursos de figuras de nieve, carnavales y desfiles, competiciones deportivas de todo tipo y representaciones musicales. En cuanto a los restaurantes, los de aquí pueden proponer platos de cocinas diversas. Los amantes de manjares orientales tendrían que ir al restaurante Bamboo Express y los mejores platos se sirven en Le Champlain. Los amantes del shopping nunca estarán aburridos aquí. Las tiendas y butiks se encuentran en esta ciudad a cada paso.



CATARATAS DEL NIAGARA

La ciudad está situada en la frontera de los Estados Unidos y el Canadá. El río que lleva el mismo nombre divide convencionalmente la ciudad en dos partes - los Estados Unidos y Canadá, que están conectadas por un puente. Más de 15 millones de turistas de todo el mundo visitan anualmente el Niágara, y todo esto gracias a los tesoros de la naturaleza - Cataratas del Niágara. Cada año se abren nuevos complejos turísticos y hoteles, alrededor de los cuales hay restaurantes y bares, así como numerosos pabellones de comercio y mercados. La mayoría de las excursiones están relacionadas con las cascadas, le dedican exposiciones de fotografías, organizan conferencias y espectáculos de entretenimiento para los niños sobre ellas. En la parte americana de la ciudad están situados 500 km de la cascada, pero la mayoría aún se encuentra en la parte canadiense. La acumulación de cantos rodados en el lado norteamericano no permite ver la majestuosidad de la cascada, pero el lado canadiense de la catarata aparece en toda su gloria. Alrededor del complejo natural hay muchos miradores, muchos de los cuales literalmente penden sobre las cataratas. "Table Rock" se considera como el mirador más grande. Vale la pena señalar, que los visitantes pueden ir libremente de la parte estadounidense de la ciudad a Canadá por el Puente del Arco Iris y ver esta maravilla de la naturaleza de todos los lados. Además de paseos tradicionales por las zonas reservadas hay posibiulidad de hacer un viaje en un globo o un helicóptero y descubrir el país, a vista de pájaro. Por las noches, los bares y clubes nocturnos abren sus puertas para los visitantes, a menudo se organizan fuegos artificiales y conciertos en las áreas abiertas. En entorno de la naturaleza hermosa y dada la variedad de entretenimientos Vd. definitivamente no se aburrirá.



VANCOUVER

Vancouver es una ciudad hermosa y agradable en todos los sentidos. Uno puede vagabundear por las calles espaciosas durante horas y admirar edificios antiguos del siglo XIX y disfrutar del canto de los pájaros y ruido del follaje en un parque umbroso. El parque más popular es el Stanley Park, que asombra con la abundancia de sus bosques de coníferas, en cuya espesura se esconden lagos de agua cristalina. El parque fue inaugurado no hace mucho, en 1886 y está bañado por el Océano por todos lados. El parque Stanley se convirtió en el icono de Vancouver, cada turista tiene que dar una vuelta por sus alamedas preciosas y disfrutar de su aire puro. La parte antigua de la ciudad es el barrio de Gastown, donde construían sus casas los primeros colonos. Durante los paseos por los pavimentos adoquinados, Vd. verá casas antiguas en cuya construcción se utilizaba ladrillo cocido, material más duro de aquel entonces. El puente colgante no es menos interesante y curioso. Es una construcción de arquitectura única. Al lado del puente está situado un parque de tótems, se puede subir la cima de la montaña Grouse, de cuyos miradores se ve la ciudad y los alrededores con todo detalle. Después de un paseo vertiginoso por el puente, uno puede descansar en el malecón Marine Drive y tomar café en uno de los restaurantes numerosos . En 1971 en la ciudad fue abierta una sala de exposición llamada el Museo de los Siglos, que alberga un Museo Marítimo y Planetario. Si Vd. tiene la suerte de estar en Vancouver en el período de mayo a septiembre, podrá presenciar un acontecimiento asombroso - la migración de las ballenas. Las ballenas se aproximan tanto al litoral de la isla que uno puede examinarlas con todos los pormenores. Los turistas encantados por el espectáculo pueden pasar horas enteras en la costa admirando con asombro las ballenas que nadan en las ondas, diestras y garbosas.


MONTREAL

Las primeras colonias en el territorio de Montreal aparecieron en 1535, hoy en día Montreal es una metrópoli moderna, miles de turistas vienen aquí para ver sus lugares de interés. Una de las aventuras más fascinantes es el examen de los alrededores de la ciudad desde el mirador, situado en la montaña Mont-Royal. Otro mirador se ubica en el techo de uno de los rascacielos de la ciudad, y uno más en la torre de la iglesia Notre-Dame-de-Bon-Secours. La iglesia atrae no sólo con su magnífica arquitectura, sino también con el observatorio que ella alberga. Así que aquí Vd. puede no sólo visitar los alrededores de Montreal sino también observar estrellas. Cerca de la iglesia está la plaza central donde está instalado el monumento al fundador de la ciudad Paul de Maisonneuve. Aquí mismo uno puede ver los monumentos en memoria de la reina Victoria. El barrio Le Mille Carré Doré es bastante curioso, aquí hay tanto palacios magníficos en el estilo del Renacimiento como los monumentos de la arquitectura del estilo barroco y edificios modernistas. El edificio más significante es el palacio Meredit. En el centro de la ciudad Vd. podrá ver la estación Windsor construida a finales del siglo 19. A primera vista el edificio parece una construcción moderna y es difícil creer que las obras fueron acabadas hace más de cien años. Cerca del edificio de la estación está situado un objeto religioso muy importante - la iglesia de Saint George, ejemplo de arquitectura del estilo neo gótico. Las salas de la iglesia están decoradas con vitrales, tapices y preciosas esculturas de madera. Las mansiones más hermosas están en el bulevar Saint Josef. Para los visitantes están abiertas las puertas de los museos más grandes: de la Historia, de la Etnografía de la Región, del Arte indio y del museo Paleontológico.